Frida
asistía a La Escuela Preparatoria Nacional que tenía más
o menos 25-35 chicas (depende
de la fuente) de
2.000 estudiantes. Frida vio al muralista famosa, Diego Rivera por
la primera vez
cuando él estaba pintando los murales de la escuela. Ella
solo tenía quince años y Diego tenía
más de quince años su mayor pero Frida les dijo a sus amigas
que quisiera tener sus hijos en el
futuro. Este fue dónde su obsesión con Diego empezó.
Muchos años después, Frida encontró a Diego Rivera
por la segunda vez. Esta vez se casaron. Rivera
era gordo y feo pero muchas mujeres, inclusive Frida, pensaban que él
era atractivo. Por esta
razón, él tenía muchos amorios. El matrimonio
de ellos era muy liberal y Frida tenía muchos
amorios también
y a veces, con otras mujeres. Esta libertad en su matrimonio, de
cualquier manera,
causó muchos problemas entre los dos.
Una vez, cuando Frida lo convenció de regresar a México de
los Estados Unidos, Rivera estaba enojado
con ella y él tenía un amario con la hermana de Frida.
Este típo de comportamiento causó su
separación en 1935 y su divorcio en 1939 pero en 1940 se casaron
otra vez. Su matrimonio era muy
extraño y uno de obsesión.